Algunas experiencias en evaluación de trabajo académico Some experiences in evaluation of academic work

Rosa María Lince Campillo1 y Fernando Ayala Blanco2


Resumen: Las actividades académicas e investigación que son más significativas, no coinciden con la opinión y criterio de quienes evalúan. Dar cuenta de actividades realizadas; someterse a evaluación periódica para que se asigne o renueve nivel; como responsable de proyecto de investigación informar anualmente avances, metas y objetivos cumplidos; periódicamente renovarse en SIN. Los formatos para registrar información son complicados, homologan actividades pero éstas son distintas según el área de trabajo, si no capturamos en los registros no permiten guardar información.


Abstract: The people who work in Institutions of Higher Education, are constantly faced with the dynamics of various evaluation processes. Therefore, we must keep the Curriculum Vitae updated. Paradoxically, the academic and research activities that for us may be the most significant, even representing an achievement, are not always the same for those who evaluate our work.


Palabras clave: trabajo académico; evaluación; cuerpos colegiados


Trabajamos en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y en los últimos 25 años, hemos sido constantemente tanto sujetos evaluadores como evaluados.

Entre los cargos desempeñados: representante de los profesores en diferentes instancias académicas entre cuyas funciones están procesos de evaluación de Investigadores, Profesores, Técnicos Académicos, Ayudantes de Profesor y Alumnos, para ingreso, promoción o incluso reconocimiento con algún premio.

Queremos compartir nuestra experiencia que no necesariamente es la que se da en todos los procesos que se realizan diariamente entre los profesores en la UNAM.

Antes de reflexionar en torno a los trabajos concretos que se realizan en un órgano


1 Doctora en Ciencia Política, UNAM, FCPyS, CEP, metodología hermenéutica aplicada a la interpretación de relaciones de poder en manifestaciones socioculturales, lince@unam.mx.

2 Doctor en Ciencia Política, UNAM, FCPyS, CEP, grupos de poder y expresión de relaciones de poder en el arte, ayalafernando80@hotmail.com.

colegiado, es pertinente señalar que se entiende por “órgano colegiado”: el trabajo colegiado que se desarrolla en un espacio en que la función se asigna a diferentes personas, reconocidos como unidad, la cual debe llegar a un acuerdo o consenso para la realización del acto respectivo.

Como es muy difícil lograr la unanimidad de criterios, se adopta como regla general el principio de la mayoría simple. Puede haber órganos que establecen criterios de mayor rigor, esto dependerá de la naturaleza de la institución a la que pertenece un órgano colegiado.

Ahora bien, nuestro ámbito de trabajo en un órgano colegiado ha sido –como ya se mencionó— la Universidad Nacional Autónoma de México, particularmente la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Con base en esta experiencia reflexionaremos sobre el Estatuto del Personal Académico de la UNAM, en especial nuestra actual participación como Consejeros Técnicos de Ciencia Política.

Creemos conveniente señalar algunas precisiones:

  1. El Estatuto del Personal Académico rige las relaciones entre la Universidad y su personal académico de acuerdo a su Ley Orgánica y no ha sufrido modificación sustanciales desde su creación

    En el Congreso Universitario de 1990 se planteó la necesidad de realizar una revisión profunda de los ordenamientos jurídicos que rigen la vida universitaria; entre ellos, el Estatuto del Personal Académico (EPA), que constituye uno de los principales instrumentos de regulación del quehacer académico, a partir de conceptos, definiciones, procedimientos y contenidos de carácter estrictamente académico. El 7 de julio de 2004 se convocó a realizar una Reforma al EPA, cosa que hasta la fecha no ha sucedido.

  2. El personal académico está integrado por: técnicos académicos; ayudantes de profesor o investigador; profesores e investigadores.

  3. La selección para ingreso, nombramientos, promociones y adscripción del cuerpo académico, la hace el Consejo Técnico de cada entidad, previa opinión razonada de una Comisión Dictaminadora o en su caso el Consejo Asesor Interno, considerando la capacidad demostrada, antecedentes académicos, experiencia de los aspirantes y necesidades de la dependencia. Cuando se contrata por artículo 51 es prerrogativa del

    Director (a) de la dependencia proponer al H. Consejo Técnico la contratación previa evaluación de la Comisión Dictaminadora correspondiente.

  4. De acuerdo con la Legislación Universitaria, se decide la contratación y se otorgan las distinciones, estímulos y recompensas que correspondan. Cada nivel y categoría tiene sus propios requisitos.

  5. En todos los casos se notifica a los interesados de las resoluciones que afecten su situación académica con objeto de que se ejerza el derecho a inconformarse.

El primer problema que enfrentamos, es el desconocimiento tanto de la legislación en cuanto a procedimientos, requisitos para cada nivel, así como del organigrama de las diferentes Comisiones y sus funciones, por lo que en ocasiones se demandan a algunas instancias cosas que no corresponden al ámbito de su competencia.

Una segunda gran dificultad que se enfrenta es que los formatos en los que se solicita la información son extremadamente complicados, no son precisamente “amigables”, porque homologan actividades que se desarrollan pero éstas son distintas según el nivel y área de trabajo, lo que en algunos casos significa dejar fuera actividades desarrolladas ya que quien diseñó el sistema no contempló cada una de las actividades que se realizan.

A lo anterior se agrega que en algunos rubros existen preguntas difíciles de responder con datos precisos, si uno no contesta los datos con exactitud la información no se puede guardar debidamente, al mismo tiempo que hay otras actividades que se repiten. Por ejemplo, cuando uno declara haber asesorado a un alumno, preguntan ¿cuál fue la fecha de inicio de la asesoría? ¿cuál es el grado de avance del trabajo? o en su caso ¿cuál fue la fecha de finalización de la asesoría? Para pasar a ¿cuántas horas se le dedicaron al alumno?, no conocemos a profesor alguno que traiga consigo un cronómetro o lleve control de las fechas de asesoría, además si uno empieza a asesorar a un alumno en 2016 y en el informe de 2017 declara uno que el trabajo está por finalizar, aparece un letrero que dice “usted está reportando una actividad que corresponde a un año anterior”… como si todos los alumnos concluyeran sus trabajos justamente con el calendario civil.

En el segundo caso que se menciona cuando en investigación preguntan si uno es responsable de algún proyecto de investigación, más adelante en otro rubro se interroga por la responsabilidad de organización de grupos de investigación, lo que implica que se repita la

información que ya se declaró, sólo por dar unos ejemplos.

Ahora bien, los formularios que debemos responder respecto a la labor desarrollada son distintos dependiendo de a qué Institución debemos dar cuenta de las actividades desempeñadas, pero en todos ellos se solicitan datos que pueden ser irrelevantes, aunque debemos tener claro que si no llenamos los registros no nos permiten guardar la información.

Otro ejemplo, para la Dirección General de Asuntos del Personal Académico de la UNAM existe un sistema al que es posible acceder en línea, mismo que no coincide totalmente con el que se desarrolló en la FCPyS para realizar el informe anual (que recordemos, estamos obligados a presentar cada año según el EPA de la UNAM). Para complicar aún más la situación, recientemente se modificó la plataforma del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y en ella (quienes pertenecemos al Sistema Nacional de Investigadores) debemos accesar para dar cuenta de la labor desempeñada, sistema diferente a los dos anteriores.

Además, al migrar de una plataforma a otra, alguna información se perdió, por lo que recibimos un mensaje que decía que debíamos completar los datos faltantes… Cuando nos pusimos en contacto con el auxiliar en CONACyT, sólo le hicimos la siguiente pregunta ¿Está usted consciente de que la antigüedad en la UNAM es de 41 años? ¿Hay que localizar los datos que se perdieron y volver a llenar los espacios faltantes de un expediente que consta de cerca de 200 cuartillas? ¿Sabe cuánto tiempo necesitaría para completar mi CV? Y no hubo respuesta.

Ante situaciones que podrían parecer kafkianas, en este texto se buscará presentar paso a paso algunas de las dificultades que enfrentan los investigadores y académicos por obligación en los procesos de promoción; también se pretende que este escrito sirva como una guía para todos aquellos que deseen ser evaluados para promoverse de acuerdo a sus informes de actividades; y quizá una última intención sea simplemente no sentirnos solos en los procesos de evaluación al darnos cuenta de que enfrentamos las mismas dificultades.

Por último, no sólo los evaluados se angustian al enfrentar sistemas “perversos” y por ello se considerará el punto de vista de los evaluadores que se enfrentan a muchos problemas para establecer criterios de evaluación y asignar calificaciones de forma precisa y justa.

De los Evaluadores

Y La participación en Consejos, Comités Académicos y Comisiones Dictaminadoras son nombramientos honorarios, por los que no se perciben ingresos.

Y Los integrantes de estas Comisiones, no siempre tienen el mismo nivel de compromiso hacia el trabajo, lo que significa que a veces no haya regularidad y puntualidad. Algunos profesores van cuando saben que se trabajará algún caso en el que tienen interés.

Y En ocasiones no se acepta que las decisiones son colegiadas, y cuando hay discrepancia se emiten opiniones al margen de la Comisión de la que se forma parte, favoreciendo la división y no respetando el trabajo colegiado.

Y La continuidad en el trabajo es importante, para asegurar la aplicación de los mismos criterios a todos los evaluados.

Y Las reuniones de las diferentes Comisiones, se desarrollan en horas laborales y la revisión de un caso puede realizarse en varias sesiones, lo que implica dejar de lado actividades personales. En el Estatuto del Personal Académico no se establece sanción alguna por incumplimiento. Se contempla en el reglamento interno de las Comisiones. En caso de no asistir a tres sesiones consecutivas, sin justificación, el elemento podrá ser sustituido.

Y La Comisión Dictaminadora debe contar con miembros de preferencia externos a la entidad, para evitar favoritismos. Éstos deben desplazarse desde sus lugares de trabajo. Sin embargo, cuando se trata de profesores externos, no siempre conocen el trabajo que se desempeña en la entidad y utilizan los criterios que rigen en la entidad de procedencia (Instituto Mora, COLMEX, FLACSO, CIDE, SNI, etc.) tratando de imponerlos al resto de la Comisión.

Y Lo mismo sucede al tener cambios en la composición de las Comisiones Dictaminadoras (en promedio deben renovarse cada dos años); los nuevos miembros de las Comisiones, en la mayoría de los casos, desconocen los reglamentos, estatutos, lineamientos o criterios establecidos por uso y costumbre, etc. Los profesores que se integran deberían entrenarse para adaptarse a los lineamientos con los que se trabaja.

Y Las Comisiones no siempre tienen claro qué se está evaluando, no es lo mismo a) calificar la competencia académica de un profesor, en un concurso de oposición; b) que calificar sus méritos académicos en el caso del otorgamiento de premios; c) si el alumno cumplió con el objetivo de incidir con su actividad en el mejoramiento de la situación de vida de una comunidad, en el caso de reconocimiento a la labor realizada en Servicio Social; d) o si el candidato propuesto para ingresar tiene el perfil idóneo para cumplir con las actividades que requiere la entidad o programa al que se responde.

Y Todos los dictámenes deben estar perfectamente justificados y fundamentados, para que el evaluado conozca las razones de una determinada calificación y en caso de estar inconforme pueda impugnar debidamente. Se debe tener clara la diferencia entre emitir adjetivos calificativos y fundamentar una calificación otorgada.

Y En ningún caso, los evaluadores tienen obligación para completar, corregir u ordenar la documentación de los evaluados. Es indispensable entregar una relación de documentos que sea cotejada y firmada por el responsable de custodiar los expedientes.


De los Evaluados

¿Cuáles son las formas como se procede para estudiar los currículos? Esta decisión debe ser colegiada ¿Qué ha hecho el candidato que si él no lo hubiera hecho nadie lo habría hecho? ¿Cuál es la excepcionalidad de su obra? Aquí la respuesta depende de la presentación del currículo o si entre los evaluadores hay alguien que conozca al candidato y presente su perfil, pero cuando los dictaminadores son externos para asegurar la neutralidad esto no es posible. Así que se recomienda tener en las Comisiones miembros internos a la entidad así como algunos de preferencia externos para mantener el equilibrio en las argumentaciones y discusiones.

Recapitulando y ordenando las ideas expuestas hasta aquí, se puede decir que el trabajo colegiado en la esfera académica e investigativa en la UNAM tendrá que considerar –en nuestra opinión— los siguientes aspectos:

  1. Las características y las funciones más relevantes en la Docencia, la Investigación y la Extensión, en las figuras académicas de profesores de carrera, investigadores, técnicos académicos, profesores de medio tiempo y profesores de asignatura;

  2. La carrera académica, poniendo especial atención en los procedimientos de ingreso, definitividad y promoción, estableciendo las particularidades de Profesor de carrera, Investigador, Profesor-investigador, Técnico Académico, Profesor de Medio Tiempo, Profesor de Asignatura y Ayudante de Profesor;

  3. Criterios, principios y características que deben seguirse en la evaluación de los

    académicos;

  4. Superación académica;

  5. Apoyo institucional;

  6. Derechos, obligaciones y sanciones; y finalmente

  7. Cumplimiento en la aplicación del EPA.

Lo cierto es que la pedagogía y la investigación se inscriben en un proceso de integración social y de transmisión de conocimientos y referentes culturales, mediante el cual se conforma la personalidad y educación de cada individuo. En dicho proceso intervienen las distintas experiencias históricas, filosóficas, políticas, ambientales, económicas y familiares que inciden en una comunidad. En nuestra experiencia en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, la educación, la enseñanza y la investigación las entendemos como un conjunto de iniciativas institucionales dirigidas a orientar, de manera sistemática, el proceso pedagógico hacia objetivos previamente fijados desde la perspectiva de las Ciencias Sociales, y mediante métodos históricamente probados. Ciertamente la libertad de cátedra que siempre ha imperado en nuestra Máxima Casa de Estudios, ha permitido enriquecer las políticas educativas institucionales, respetando la individualidad y personalidad de cada uno de los integrantes de esta comunidad. Este espíritu es el que debe imperar en los órganos colegiados.

Para terminar nuestra exposición compartiremos una anécdota.

Las Medallas Gabino Barrera y Alfonso Caso, se otorgan al mejor promedio. Se considera que no tengan en su expediente NP y NA y también la titulación temprana. Hay una diferencia entre terminar en tiempo y forma dentro de lo legal y merecer un reconocimiento por titulación temprana.

Aquí tuvimos que enfrentarnos a que los alumnos de Medicina se gradúan el mismo día porque hacen su examen al mismo tiempo.

En algún momento consideramos que por la edad promedio a la que realizan los estudios de Posgrado, las mujeres debían tener una consideración especial, ya que es justo la edad promedio en la que se embarazan, sin embargo, al estudiar 5 generaciones, nos dimos cuenta de que las mujeres no sólo se graduaban antes que los hombres, sino que lo hacían con mejores promedios.