Ocupación y género entre mujeres microempresarias en la frontera Norte. Los micronegocios informales en Nogales, Sonora


Occupation and kind between women microbusinesswomen in the border North. The informal microbusiness in Nogales, Sonora


J. Guadalupe Rodríguez Gutiérrez1


Resumen: Explicamos brevemente el mercado laboral en México, para identificar tres configuraciones laborales, las ocupaciones clásicas-formales; ocupación informal, no clásica pero tradicional en países en desarrollo y; una tercera ocupación, atípica, informal, pero por fuera del mercado clásico-formal. Se describen las características de los micronegocios en México. Explicándose las características de género entre la población ocupada en los micronegocios. En el segundo apartado, a través de una encuesta a micronegocios de Nogales, Sonora, se reflexionan las condiciones del emprendimiento precario desde la informalidad. Lo anterior, para explicar la necesidad de conceptos ampliados que expliquen las otras formas de trabajo.


Abstract: We explain brief the labor market in Mexico, with the aim to demonstrate three labor configurations, the classic - formal occupations; informal, not classic but traditional occupation in developing countries and; a third occupation, atypical, informal, but externally of the classic - formal market. The characteristics of the microbusiness are described in Mexico. The characteristics of kind being explained between the working population in the microbusiness. In the second paragraph, across a survey to microbusiness of Walnuts, Sonorous, there are thought over the conditions of the precarious emprendimiento from the informality. The previous thing, to explain the need of extended concepts that should explain other forms of work


Palabras clave: ocupación; formalidad; informalidad; micronegocios.


Introducción

La globalización económica ha implicado la paradoja del “crecimiento sin empleo” (OIT, 2002: 32; OIT, 2007: 8). Es decir, las economías no generan suficientes fuentes de empleo para absorber la fuerza de trabajo, de tal modo que teóricamente, se “empuja” a los trabajadores y sus familias hacia condiciones de vulnerabilidad laboral o bien, insertarse en la economía informal en



1 Profesor Investigador del departamento de Trabajo Social en la Universidad de Sonora.


condiciones precarias. Para la Organización internacional del Trabajo (OIT), en la medida que va incorporándose más hombres a la economía informal, las mujeres tienden a ser empujadas al extremo de más bajos ingresos de la misma (OIT, 2002b: 39). La OIT explica que después de dos décadas de lento crecimiento económico, se continuará con el desempleo estructural y, crecerá la ocupación informal que ya concentra 130 millones de trabajadores en condiciones de incertidumbre y vulnerabilidad, distribuidos en economías desarrolladas, emergentes y en desarrollo (OIT 2016). El trabajo informal ha significado la creación o acceso a empleos a grupos específicos de mujeres que carecían de éstas posibilidades ya que algunas mujeres ejercieron cierto grado de elección y flexibilidad con respecto a su trabajo productivo y reproductivo (OIT, 2002b). Podríamos hablar de “feminización del trabajo informal” donde las brechas de género se agudizan (Abramo y Valenzuela, 2005, 2006; Valenzuela, 2005).

Para México, desde la firma del TLC, se ha registrado un estancamiento del PIB, ya que en promedio el crecimiento ha sido del 3% anual, lo que es insuficiente para generar fuentes de empleo con calidad. La crisis financiera 2008-2009 provocó que el PIB presentara tasas negativas en 2009 y lento crecimiento económico menor al 5% entre 2010-2012; tendencia que se mantienen para 2016-2017 (OIT, 2016). Pese al bajo dinamismo económico, el mercado de trabajo mexicano se ha caracterizado por un creciente número de ocupaciones informales. Para INEGI, el valor agregado bruto (VAB) generado por el empleo informal entre 2003-2014 -como proporción del PIB- representa entre 24 y 28 por ciento. Dividiéndose 11.3% del empleo informal en el sector informal y 14.6% por fuera del sector informal. La feminización creciente del trabajo informal en México se explica por 9.5 millones de mujeres que realizan actividades económicas, pero bajo ciertos grados de incertidumbre y vulnerabilidad. La presencia de las mujeres representa alrededor del 40% del empleo informal que, ocupaciones que presentan brechas de género tan agudas como las identificadas en sector formal. La pregunta que nos planteamos, es que condiciones coexisten para una adopción de estrategias que permita mejores condiciones laborales y paralelamente fortalecer la perspectiva de género.


Apertura comercial y economía informal

En la primera década del presente siglo, distintos autores como Saskia Sassen, entre otros han dado cuenta que, tanto en países en desarrollo, como en países desarrollados, las formas de


empleo formal están transformándose a consecuencia de la mayor apertura comercial y flexibilidad laboral. En los países en desarrollo, la política macroeconómica de mayor inversión extranjera directa para facilitar la entrada de empresas trasnacionales (ETN) hace a un lado, a micro y pequeños negocios. Paralelamente las ETN se reestructuran incorporando nuevos esquemas flexibles (cadenas globales de valor). Para el caso de la economía mexicana, a dos décadas de apertura comercial, el balance macroeconómico en el en los últimos años ha mostrado signos de estancamiento, después de la caída del -4.7 % en 2009 a consecuencia de la crisis financiera 2007-2008, la economía mexicana prácticamente se estancó con un débil crecimiento del 1.4 % en 2013; 2.1 % en 2014 y 2.5 % en 2015; tendencia recesiva que según estimaciones del banco mundial, continuará entre 2.6 y 2.7 para 2016 y 2017 (El Financiero, 12.01.2015). El estancamiento de la economía mexicana es acompañado de efectos perversos, como es el empleo formal e informal, pobreza, entre otras. Por ejemplo, en la gráfica siguiente, para el tercer trimestre del 2015, entre las ciudades más urbanizadas de México, se observa una ocupación en actividades formales de 14.1 millones, mientras que aquellos ocupados informales son 11.5 millones, divididos entre aquellos que están ocupados en el sector informal (6.3 millones) y las ocupaciones informales (5.1 millones) que se generan en el sector formal.

En otras palabras, de la población ocupada en México, que asciende a 25.6 millones (INEGI, 2015), se observa que 55% está ocupado en el sector formal y 25% en el sector informal y 20% ocupados informalmente por fuera del sector informal. Es decir, 5.1 millones de mexicanos son ocupados mediante prácticas informales al interior de empresas formales, por ejemplo, los ocupados por honorarios en el gobierno, entre otras formas de subcontratación. Lo anterior, impacta directamente en las relaciones de trabajo permanente y de tiempo completo. La gráfica siguiente, sintetiza el impacto del estancamiento económico en cuanto a que las formas de ocupación están siendo reemplazado por acuerdos contractuales informales (5.1 millones) dentro de la propia economía formal, así como mayor número de ocupados en el sector informa (6.3 millones), (OIT, 2014).


Grafica 1

Población ocupada en las áreas más urbanas en México. 2015*.

Tipo de ocupación por sector formal e informal



Ocupados informales

fuera del S.I.*, 5,115,633


Ocupacion en el sector Informal…

Ocupación

Formal, 14,110,633


Fuente: Construcción propia en base a INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo. Informalidad laboral. Indicadores estratégicos. *datos al tercer trimestre de 2015.


En la gráfica anterior, se observa que los cambios estructurales de la economía global y sus efectos en las economías locales, implica el desarrollo de nuevas ocupaciones o la ampliación de viejas formas de ocupaciones del sector informal, quienes trabajan en condiciones de incertidumbre, vulnerabilidad; ocupándose en diversas actividades informales:

Para la OIT el empleo en el sector informal no se contrapone con el formal, por el contrario, desempeña un papel importante en la reducción del circulo de la pobreza, en ocasiones el empleo informal es la fuente principal –y con frecuencia- como única fuente de ingresos para


segmentos de la población cuya actividad se concentra en estas formas de ocupación no formales.

¿Sin embargo, algunos investigadores han identificado que algunos ocupados en el sector informal permanecen en la “circularidad de la pobreza” ; de hecho, en algunos casos, la actividad ocupacional es del tipo de “sobrevivencia” de tal forma que, los ingresos y las ocupaciones perpetúan su posición desfavorecida y la pobreza en la que viven. Según datos de la siguiente gráfica siguiente, existen 1.2 millones de jóvenes entre 15-24 años quienes son trabajadores informales en el sector formal, es decir son ocupados en condiciones de vulnerabilidad e incertidumbre laboral.


Grafica 2


Fuente: Construcción propia en base a INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo. Informalidad laboral. Indicadores estratégicos. *datos al tercer trimestre de 2015.


En la mayoría de los países en desarrollo, la ocupación informal es un componente de la mano de obra mayor que el empleo formal (OIT, 2013). Por ejemplo, para el caso de la economía mexicana, los 6.3 millones de ocupados en el sector informal comprende a las personas ocupadas que -por ley o en la práctica- no se encuentran sometidas a la legislación laboral y hacendaria nacional; no pagan el impuesto sobre la renta, pero tampoco tienen derecho a la protección social ni a los beneficios laborales. El empleo informal abarca distintas situaciones de empleabilidad, por ejemplo: empleadores, asalariados, trabajadores por cuenta propia, trabajadores familiares auxiliares (no remunerados) y miembros de cooperativas de productores.

En el contexto de la recesión económica, la ocupación informal comprende ocupados con grados de estudios con educación media superior y superior, por ejemplo según datos de


ENAMIN (INEGI, 2015), en México el empleo en el sector informal en 2015 registro la captación de 1.4 millones de ocupados con estudios de media superior y superior en el sector informal; además de ser un sector con alta vulnerabilidad, también destacan los 1.7 millones de contrataciones informales el sector formal, ocupados que poseen estudios de media superior y superior.


Grafica 3


Fuente: Construcción propia en base a INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo. Informalidad laboral. Indicadores estratégicos. *datos al tercer trimestre de 2015.


Cuando señalamos que el empleo informal forma parte estructural de la empleabilidad en México, como resultado del lento crecimiento y las cada vez mayores contrataciones informales en todos los sectores de la economía, sean los 2 millones de ocupados en el sector informal del comercio, como los 895 mil ocupados informales del sector formal del comercio. O bien, los 1.3 millones de ocupados informales en el subsector de restaurantes y servicio de alojamiento que representa casi el doble de los ocupados formales (740 mil). Aunque existe una gran heterogeneidad en las condiciones laborales y formas de regulación laboral de los trabajadores en ocupaciones informales, éstos comparten una vulnerabilidad básica, es decir, que satisfacen de una u otra forma algunos tipos de necesidades y establecen algún tipo acuerdo que regula las formas de relaciones ‘informales’ (OIT, 1991, páginas 56).


Los micronegocios y la perspectiva de género

Las ocupaciones formales e informales en los países en desarrollo forman parte de la economía; siendo las estadísticas las que dan cuenta de la presencia de dichas ocupaciones informales dentro del sector formal, como en el sector informal. Diferenciar estas dos formas de ocupación informal son especialmente importantes para comprender la heterogeneidad del mercado laboral y la calidad del empleo (OIT, 2013). La OIT ha señalado que para los países en desarrollo la tasa de desempleo es insuficiente para comprender adecuadamente las condiciones y los desequilibrios en el trabajo, siendo más eficiente señalar las ocupaciones en el sector informal, como aquellas ocupaciones informales por fuera del sector formal.

Las estadísticas sobre las ocupaciones informales son importantes para el diseño, evaluación y seguimiento de programas y políticas gubernamentales dirigidas a gestionar empleo. Estos incluyen programas de formación, programas para ayudar a las personas para comenzar o reinsertarse al trabajo “estructurado”, identificar tipos de subsidios salariales, reducción de impuestos y otros incentivos para generar empleo y para monitorear las condiciones de trabajo y la protección jurídica y social de los trabajadores informales.

Para el caso de México, las estadísticas nacionales de los micronegocios (ENAMIN, 2012) dan cuenta del conjunto de ocupados en negocios propios o empleados en otros micronegocios. Por lo pronto, en las estadísticas de los ocupados en los micronegocios (ENAMIN-INEGI, 2012) son emprendedores de negocios, sin necesidad de que éstos se consideren como microempresarios, ya que no necesariamente quien establece o inicia un micronegocio cumplirá con las normas, procedimientos y metas de un microempresario, de tal forma que, podrían identificarse actividades de ocupaciones que representan un refugio al desempleo, es decir ocupaciones de “sobrevivencia” que podrían considerase como negocios sin fines de ganancia, por ejemplo, piénsese en el ejercito de jefes de hogar que trabajan por cuenta propia, que, según datos de INEGI –ENOE (2017), ascienden a 6.6 millones de jefes de hogar, de los cuales el 22 por ciento corresponde a mujeres.

Para el caso de México, en la encuesta de ENAMIN 2012, identificamos que en México existen 9.1 millones de emprendedores de micronegocios, de los cuales 48% son varones y 52% mujeres. Inicialmente, si bien es un porcentaje equitativo, éste no necesariamente significa “equidad de género”, por el contrario, podríamos considerar que las condiciones sociales


conducen y presionan a las féminas a incorporarse a un mercado laboral inseguro y vulnerable. La brecha de género importante, sea entre empleadores o entre trabajadores por cuenta propia. Según datos de la gráfica siguiente, las féminas representan 4.7 millones de micro emprendedoras frente a 3.4 millones de varones. Sin embargo, las féminas ocupan un mayor porcentaje de empleo por cuenta propia.

Las estructuras invisibilizadas de género están implícitas en los patrones culturales, percepciones de los propios individuos, que, en el conjunto de sistema de prácticas al interior de la familia, se reproducen pautas de género. Las diferencias de género representan una desventaja en términos de alteración de los ciclos de producción (vida laboral) y reproducción social (vida personal) entre los y las trabajadores, también representa una brecha de conocimientos y habilidades en el uso e incorporación de las tecnologías de la información y comunicación por parte de las féminas situando a las mujeres en una posición de desventaja, lo cual tendríamos que investigar ¿Cómo impacta esta brecha en las condiciones estructurales de los micronegocios cuyos dueños son mujeres?.


Grafica 4

Emprendedores de micronegocios en México 2012* por genero


Mujeres ,

4,753,321

Hombres,

4,439,169


Fuente: Construcción propia en base a INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo. Informalidad laboral. Indicadores estratégicos. *datos al tercer trimestre de 2015.


Por ejemplo, en la gráfica siguiente, cuando se diferencia por tipo de dueño que ofrece empleos en micronegocios, se identifica que, por cada diez empleadores, siete son hombres y tres féminas. Esta brecha se cierra a favor de las féminas entre aquellos que sólo se consideran


trabajadores por su cuenta en micronegocios. De esta gráfica destaca que los varones se perciben como empleadores, siendo ésta percepción con una relativa mayor certidumbre y estabilidad frente a aquellos que se identifican como ocupados por su cuenta.


Grafica 5

Micronegocios por tipo de dueño en México. 2012*


Fuente: Elaboración propia en base a ANAMIN 2012, INEGI.


Otro indicador de género, que consideramos genera estabilidad y empoderamiento en la ocupación es el contar con un local, espacio, o vehículo en el que se ejercer el micronegocio. En este sentido, cuando observamos la gráfica siguiente, según datos de la encuesta ENAMIN (Encuesta Nacional de Micronegocios Nacionales) del INEGI (2012) identificamos por género que las condiciones de contar con un local o vehículo por género es similar a favor del varón, sin embargo, en ambas situaciones, las féminas posen un indicador de desventaja frente al varón.


Grafica 6 Disponibilidad de local, México 2012


Fuente: Elaboración propia en base a ENAMIN 2012, INEGI.


Condiciones estructurales que empujan la brecha de género

No se trata de hacer una apología en cuanto a las brechas de género en cada uno de los indicadores, el objetivo es dar cuenta de las estructuras del tipo “techo de cristal” que presionan la brecha de género entre mujeres emprendedoras de micronegocios en México. Por ejemplo, sea la brecha de tipo de dueño o el de disponibilidad de local, las gráficas indican una tendencia estructural a favor de los varones.

La brecha estructural a favor del varón se intensifica en aquellas actividades laborales precarias o en condiciones de vulnerabilidad, por ejemplo entre las ocupaciones informales dentro del sector formal, como el manufacturero, contrataciones de migrantes que están de retorno en trabajos de alta vulnerabilidad como call center, contrataciones de free lance, etc.: brecha estructural que empuja a los individuos (hombres y mujeres) a operar en condiciones laborales precarias, e insertarse en condiciones de informalidad (ocupación informal en el sector formal), aún en empresas que operan en el sector industrial (Del Re , A. 1995). Otras condiciones precarias que se presionados (as) a aceptar los trabajadores informales, es pactar labores sin salario y sin prestaciones, laborar por destajo, por tarea asignada y, si es que hay fuente de trabajo, por ejemplo, valórese los 8.8 millones de jefes de hogar que no están ocupados, de los cuales 53% son mujeres jefas de hogar que no están ocupadas (De la Garza, 2001, 2006; Miguélez y Prieto, 1999).

La incorporación al mercado laboral de las féminas se sucede en condiciones estructurales diferenciadas, matizadas por roles yuxtapuestos de las féminas entre el ciclo reproductivo y productivo, no así el de los hombres, cuyos roles se diferencian entre ciclo social y ciclo productivo; es decir el ciclo de producción (ocupación/trabajo) y el ciclo de reproducción (vida personal/atención al hogar) se ensamblan en el caso de las mujeres y en el caso de los varones se diferencian, implicando para las féminas hasta dobles y triples jornadas de trabajo.

Por ejemplo, en el siguiente grafico se observa que 1.7 millones de mujeres emprendedoras que no cuentan con local, realizan sus actividades ocupacionales en el ámbito del hogar, mientras que sólo 0.7 millones de varones trabajan en su hogar, Ahora bien, habría que diferenciar entre las actividades ocupacionales que desempeñan al interior del hogar, por ejemplo, los cuidados de hijos, ancianos o labores domésticas regularmente son desempeñadas


por féminas. Estructuralmente las actividades feminizadas o los roles sociales-productivos de género presionan las actividades ocupaciones, sea que el varón posee talleres y espacios para realizar una sola actividad productiva y, en cambio las mujeres realizan actividades diversas y en espacios yuxtapuestos.


Grafica 7

Micronegocios sin local por lugar de trabajo, en México, 2012


Fuente: Elaboración propia en base a ENAMIN 2012, INEGI.


En síntesis, la crisis de la “división social del trabajo”, la precarización de las condiciones de trabajo, la aparición de nuevas actividades laborales formales e informales en los mercaos laborales están generando espacios ocupacionales donde las féminas se insertan cada vez más. Es importante comprender el mercado laboral donde se ocupan hombres y mujeres, especialmente entre el sector informal y aquellos ocupados informales en el sector formal. En este sentido, es importante realizar una encuesta que proporcione información ampliada sobre algunos aspectos que la ENAMIN no logra captar, por ejemplo: la producción o rendimiento por micronegocio; Inversiones en la empresa y auto/capacitación en el dueño o los trabajadores; Trayectoria de la unidad económica; Características del empresario o propietario de la unidad económica; capital, recuperación del capital y equipamiento, depreciación, recuperación del equipo; reinversión; Problemáticas, restricciones de funcionamiento del micronegocio, acceso a créditos; implementación de sistemas administrativos, autoadministración eficiente; Organización y relaciones con el sector formal, socios capitalistas informales, relación con las autoridades públicas.


Ocupaciones informales permanentes

Es importante identificar cuáles son las condiciones, coyunturas y dimensiones de análisis que circunscriben a los micronegocios en México, porque no se trata de emprendedores que se hayan insertado en dichas ocupaciones informales en el corto plazo, por ejemplo, según datos de la gráfica siguiente, 3.6 millones de micronegocios tienen una antigüedad entre 6 y 20 años, sobresaliendo otros dos millones con una antigüedad de 1 a 6 años. Es decir, 43% de los micronegocios de los varones poseen un periodo de entre 6 y 20 años, lo cual nos conduce a sugerir que son ocupados informales de forma permanente.

De tal forma, que podemos hablar de un sistema de ocupaciones informales no clásicas. El conjunto de ocupaciones en el sector informal o por fuera del sector informal entendidas dichas ocupaciones en un sentido ampliado, como mecanismos de sobrevivencia para enfrentar el círculo de la pobreza (lo cual no quiere decir, optimización de la fuerza de trabajo para superar el circulo de la pobreza). Si dicha ocupación, representa actividades más allá de un ingreso de sobrevivencia o supere el concepto de ingreso complementario y, ésta ocupación informal tiene un carácter de permanente, además provee el ingreso mayoritario o el mayor número de horas ocupadas por el jefe del hogar, estaríamos entonces frente a una ocupación que es el sustento principal del hogar. Este dato, es de suma importancia para justificar la necesidad de identificar cuáles son las condiciones laborales, las relaciones que regulan estas actividades ocupacionales que no son temporales, por el contrario, representan una actividad permanente, actividad que no hay restricciones legales a la entrada, coexisten otro tipo de consensos implícitos que hacen las veces de restricciones en la entrada.

Es importante identificar la importancia de las ocupaciones en los micronegocios para comprender las relaciones entre ser pobre que se ocupa en el sector informal frente al que se percibe como trabajador, microempresario o negociante en actividades informales, por lo cual podríamos identificarlo como una ocupación no clásica, para diferenciarlo de aquellas ocupaciones y empleos de la economía formal (De la Garza, 2001). En este sentido, consideramos imprescindible sugerir una serie de conceptos ampliados que permitan explica parte de las ocupaciones informales, de tal forma que en lugar de un mercado laboral informal, cabría un concepto sin restricción a la entrada, que fuse flexible, como el de ocupaciones no


clásicas permanentes y las condiciones atípicas que le explican para gestionar procesos auto- organizativos que permitan romper con la pobreza, por ejemplo, según datos de la siguiente gráfica, casi seis millones de micronegocios no llevan ningún tipo de registro, en mayor medida destacan las féminas con 3.2 millones. De tal forma, que tenemos 3.6 millones de micronegocios que poseen una antigüedad de 6 a 20 años y 6 millones que no llevan algún tipo de administración.


Grafica 8

Antigüedad del micronegocio en México, por género. 2012


Fuente: Elaboración propia en base a ANAMIN 2012, INEGI.


El no conocer o no implementar una administración eficiente, conduce a los micronegocios a operar en condiciones de “caja negra”, es decir, los ocupados informales seguirán laborando en condiciones de incertidumbre y riesgo, donde no podrán explicar eficientemente los ingresos, por ejemplo, según datos de la gráfica siguiente, los varones son mejor pagados que las féminas, destacando en prestación de servicios prestados por los varones son de mayor valor agregado, superando 30% el valor pagado de las féminas.


Grafica 9

Formato de registro contable en los micronegocios en México, por género. 2012


Fuente: Elaboración propia en base a ENAMIN 2012, INEGI.


Es importante identificar las condiciones y contextos de las ocupaciones de las féminas, que les lleven a cerrar la brecha de ingreso, de actividades ocupaciones en el sector informal, por ejemplo, la brecha en los ingresos de la gráfica siguiente, es un indicador de las condiciones vulnerables de los micronegocios de las féminas.


Grafica 10

Ingresos mensuales en los micronegocios en México. 2012

Por género, en las tres principales fuentes de ingreso (miles de pesos)


Fuente: Elaboración propia en base a ENAMIN 2012, INEGI.


Por ejemplo, si calculamos los ingresos mensuales en salarios mínimos (SM), las barreras a mayores ingresos en las ocupaciones de las féminas se visibiliza, veamos en la siguiente gráfica que por cada siete mujeres que obtienen un ingreso de un SM, sólo lo obtienen tres hombres, no así entre aquellos micronegocios que reciben de 6 a 20 SM, donde son los varones quienes


ocupan un mayor porcentaje.


Grafica 12

Nivel de ingresos al mes en los micronegocios en México. 2012 En salarios mínimos por género


Fuente: Elaboración propia en base a ANAMIN 2012, INEGI.


En síntesis, es importante no sólo identificar la brecha en los ingresos, también el significado de no contar con un sistema de autogestión administrativa o un uso eficiente de Tecnologías de la Información y Comunicación que les permita a los micronegocios eficientes dichos procesos una pérdida económica de las inversiones que realizan las féminas en los micronegocios que poseen, por ejemplo, según datos de la gráfica siguiente que por cada 7 mujeres que reciben un S.M.

Se observa la amplia heterogeneidad del sistema ocupacional informal de los micronegocios en México, observándose que 5.9 millones de emprendedores que trabajan solos, de los cuales 56.4% son féminas. Es decir 3.3 millones de mujeres son autoempleadas que podrían desarrollar actividades del tipo de sobrevivencia, cuidado de enfermos, cuidado de niños, actividades manuales, entre muchas ocupaciones entre las cuales no llevan un control administrativo o de conocimiento de ingresos, egresos, etc. el tener un conocimiento con respecto a las entradas y salidas económicas les conducirá a percibir un control objetivo de los ingresos, que repercutirá en un empoderamiento frente los micronegocios que comandan.


Grafica 13 Tamaño del micronegocio de acuerdo al número de trabajadores (2012)


Fuente: Elaboración propia en base a ANAMIN 2012, INEGI.


Microempresas familias atípicas en el mercado laboral de Nogales, Sonora

En este apartado presentáramos un breve análisis de la primera etapa del trabajo de campo de un proyecto en proceso. Se aplicaron 200 cuestionarios exploratorios entre distintas ocupaciones informales en Nogales, Sonora en 2014. La aplicación del cuestionario fue al azar, distribuyéndose entre las principales avenidas de la ciudad. Fueron validados y capturados 197 cuestionarios y, se arrojaron primeros análisis en tablas de contingencia construidas en SPSS.

En el presente apartado, se analiza una tipología de ocupados en el sector informal de Nogales, Sonora. Se identificó una tipología de trabajadores que tiene por objetivo facilitar la explicación del mercado de trabajo atípico en Nogales. Las categorías son:

  1. Empleadores. Son Trabajadores que realizan actividades comerciales y de servicios y contratan personal. Incluye trabajadores familiares, sin remuneración, sin contrato. Del total se identificó al 47% como empleadores.

  2. Trabajador por cuenta propia. Trabajadores que realizan actividades por su cuenta. Por si solos llevan a cabo las tareas productivas y no cuenta con empleados. Sin embargo, cuando es necesario solicita apoyo para realizar alguna tarea que demanda mayores esfuerzos sin establecerse una relación de empleador-empleado. Del total se identificó al 20.8%.

  3. Empleado con remuneración. Trabajadores ocupados que mantienen una relación de empleados recibiendo un salario. No existe contrato por escrito, solo acuerdos verbales. Ésta categoría representa el 23.5% del total encuestado.

  4. Empleado por cuenta propia. Trabajadores que laboran con alto grado de independencia del empleador. El empleador le otorga los productos al empleado, la infraestructura y lugar de


    venta. El empleado decide el trato con los clientes, las rutas que transitar (si es un vehículo movible) y resolver cualquier imprevisto que se presente. El empleado por lo regular sólo recibe una comisión o destajo en relación al volumen de ventas. Esta situación representa apenas el 2.2% del total de la muestra.

  5. Trabajador familiar. Trabajadores que se caracterizan por tener alguno vínculo familiar con el empleador y realizan actividades auxiliares. En algunos casos reciben remuneración económica; en otros apoyos para estudiar (compra de materiales, etc.); apoyo en vivienda y alimentación. Comúnmente no existe contrato escrito y trabajan pocas horas al día con gran flexibilidad en el empleo, sus días de trabajo y operaciones están sujetas a las necesidades del jefe de familia. Esta situación en el empleo queda representada con una participación del 6.6%.

Las tipologías anteriores están en construcción, y sólo representan un intento de homogeneidad, sin embargo, en las entrevistas se observa una yuxtaposición de roles en las microempresas.

Como hemos señalado, la informalidad no está en relación a contar con un registro federal de causantes (RFC) emitido por la Secretaria de Hacienda, ya que, pueden estar dados de alta en SHCP, contar con RFC, pero no hacer las declaraciones pertinentes, es decir una simulación hacendaria con fines de obtener un permiso. Por ejemplo, según los principales resultados de la encuesta, destaca que de 182 micronegocios, 79% dijeron contar con RFC de pequeño contribuyente.

Como se muestra en la tabla 1, 144 unidades económicas dijeron tener registro federal como pequeño contribuyente y 22 expresaron nunca haber tenido registro. El objetivo no es la “responsabilidad hacendaria”, es el obtener el permiso para realizar la actividad y, no ser presionado por los inspectores del ayuntamiento. En este sentido, en las relaciones laborales, no sólo es el cliente el que participa en algunas ocupaciones informales, también el inspector, el policía, entre otros actores forman parte del proceso de producción.

En la tabla 1, observamos, que del universo de micronegocios informales en Nogales, que cuentan con RFC destaca la ocupación de empleador con 58%, seguido del 30.5% de trabajador por cuenta propia y 29.8% de empleado con remuneración. Esta tipología de actividades coincide con las ya revisadas de ENAMIN.


Tabla 1

Tipo de empleo y registro de actividad por unidad



Tipo de Trabajador o encuestado.

Registro.

Si con rfc de

pequeño contribuyente

Si, pero me di de

baja el año pasado

Cuenta con

permiso del ayuntamiento


nunca ha tenido registro

Empleador

68

0

3

13

Trabajador por cuenta propia

25

1

11

7

Empleado con remuneracion

41

0

0

2

Trabajador familiar auxiliar

10

0

1

0

Total

144

1

15

22

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


La simulación hacendaria con fines de ocupación, se identifica cuando se observa que el ayuntamiento de Nogales, expide permisos para operar actividades económicas informales, pero, en algunos casos, cuando las actividades se realizan en espacios públicos específicos el requisito es contar con RFC vigente, lo cual conduce a los individuos a emprender actos de simulación, que podríamos problematizar como acciones de sabotaje hacia el sistema hacendario, basada dicha acciones en el cómo se percibe el sujeto frente a la ocupación, si éste percibe la actividad como coyuntural y pasajera, o bien, como un actividad itinerante, móvil, nocturna, que le será difícil al sistema hacendario localizarle. Por ejemplo, en una de las entrevistas realizadas a un taquero móvil, señalaba que no le interesaba estar en hacienda, ya que, de un momento a otro, cambiaba o cerraba su fuente de trabajo. Sin embargo, cuando se le pregunto la trayectoria ocupacional, señalo tener más de 15 años en esta actividad. Tiempo, en cual, sólo había cambiado tres veces de ruta en la cual ofrecía su producto.

En Nogales, un dato de importancia es que las oficinas municipales, al momento de rentar un espacio público, solicitan que se registren como microempresas, lo cual empuja a los individuos a la simulación hacendaria, tramitando un registro ante SHCP, el cual sólo lo perciben como un mecanismo burocrático, rígido mediante el cual, quizá perciban la inscripción ante SHCP como un acto de sabotaje a dicha restricción o rigideces para ejercer la libre acción de ocuparse. El tramitar un RFC, no implica necesariamente una responsabilidad hacendaria lo cual significa que, quizá no den seguimiento a las obligaciones fiscales. Por ejemplo, nótese en la tabla 2, que observamos los trámites del RFC que fueron condicionados por otros trámites que el microempresario necesitaba, por ejemplo 54 unidades económicas señalaron que el RFC fue


requerido para obtener la licencia fitosanitaria o permisos otorgados por el ayuntamiento. Sin embargo, 65 micronegocios no señalo razón por las cuales se dio de alta en Hacienda. Destacando sólo ocho Micronegocios como requisito para dar de alta a los trabajadores en el IMSS, hacienda o Salubridad.


Tabla 2.

Condiciones por las cuales tramitaron el RFC



Tramite.

Registro RFC


Total

Si con rfc de

pequeño contribuyente

Si, pero me di

de baja el año pasado

Cuenta con

permiso del ayuntamiento


nunca ha tenido registro

Obtener tarjeta fitosanitaria y permiso del ayuntamiento

54

0

9

6

69

Solo pagar un permiso en el ayuntamiento

8

0

6

2

16

Otener permiso de uso de suelo

7

0

0

4

11

Ninguna de las anteriores

30

1

0

9

40

Alta en hacienda

35

0

0

1

36

Pagar permiso de alcoholes

1

0

0

0

1

Hacienda, Imss, Salubridad

8

0

0

0

8

Total

143

1

15

22

181

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


Una parte de los encuestados se vieron en una confusión, pues 30 señalaron no haber cubierto ningún registro de alta en SHCP con su RFC. Para obtener las altas necesarias en Seguridad Social (IMSS) y el permiso para venta de alcoholes fue necesario pertenecer al registro federal de contribuyentes. La obtención de la tarjeta fitosanitaria debe su presencia al amplio número de unidades dedicadas a la venta de alimentos, según los encuestados, este permiso es otorgado y posteriormente rara vez existen auditorias sobre los procesos de preparación, pero sin embargo, al caducar deben de renovarlo pues de no hacerlo las autoridades podrían clausurar la unidad. Al analizar los datos por género entre quienes cuentan con RFC, se observa que 40% de las féminas dijo contar con dicho registro y 60% los varones.

Aquellos que mencionaron nunca haber tenido registró ni a nivel local (22 unidades) presentaron también contradicciones, pues, 6 unidades sí tenían permiso del ayuntamiento y tarjeta fitosanitaria, 4 pagaron uso de suelo, 2 permisos de ayuntamiento y únicamente 9 no tenían ninguna clase de permisos ni registros para operar. En cierto sentido, podríamos decir que contar con el RFC no es sinónimo de formalidad, ya que, de las 181 unidades económicas encuestadas, 143 dijeron contar con registro ante hacienda y, otras 22 señalaron no contar con


otro tipo de permisos que avalan su funcionamiento.

Género y ocupación en los micronegocios en Nogales

En relación a la caja negra administrativa definida en el apartado anterior, señalamos que, en el caso de nogales, los porcentajes son similares a los identificados en ENAMIN, por ejemplo, según datos de la encuesta, se identificó que en relación conducir una contabilidad administrativa completa en el micronegocio, destaco que 34% de las féminas declaro contar con algún tipo de contabilidad y/o contratación de contador, mientras que el 66% de los varones, dijo contratara a un contador.


Tabla 3



CONTRATO A UN CONTADOR?


Total

SI

NO

SEXO FEMENINO

40

39

76

MASCULINO

71

48

119

Total

111

87

195

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


Sin embargo, cuando se les cuestiono el tipo de contabilidad efectivamente ejercida en el micronegocio, se observó que del universo de encuestados 42.5% declaro llevar una contabilidad parcial (sólo ventas) o bien no llevar ningún tipo de contabilidad.


Tabla 4



COMO LLEVA

LA CONTABILIDAD NEGOCIO

DE

SU


Total

contabilidad

completa (cuenta con contador

contabilidad

parcial solo ventas

no se llevan

registros contables


Dato perdido

SEXO FEMENINO

40

11

24

0

75

MASCULINO

71

16

32

1

120

Total

111

27

56

1

195

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


Al igual que en el apartado anterior, para el caso de Nogales, la participación de las féminas en el mercado laboral informal de Nogales representa 40.4% con 74 casos de 183.


Observando la brecha de género, es importante identificar en la tabla 3 que los varones son empleadores y trabajan por cuenta propia. Esta brecha también se observa a nivel nacional, con los datos de ENAMIN-INEGI 2012, donde se observa que los varones están en mejores condiciones de empleo, que las féminas.


Tabla 5



COMO

SECONSIDERA EN

SU

OCUPACION

PRINCIPAL


Total


empleador


trabajador por cuenta propia


empleado con remuneracion

empleado sin

salario otro tipo remuneracion


trabajador auxiliar

SEXO FEMENINO

30

14

26

0

7

77

MASCULINO

59

31

22

2

6

120

Total

89

45

48

2

13

197

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON-


Un aspecto importante en la brecha de género son los roles productivos y reproductivos, observándose en la tabla 4, que 55.7% declaro que el cónyuge poseía trabajo. De la pareja que trabaja se identificó que 45% está ocupada en el mismo negocio y 55% está ocupada en un lugar distinto al del cónyuge. Destacando un 27.3% que declaro no tener cónyuge. Es importante hacer notar que de cada 10 puestos de trabajo atípicos en Nogales, seis son ocupados por varones.


Tabla 6


Trabajo de conyugue por Género.


Sexo

Su conyugue trabaja.


Total


si, otro lugar.

si, mismo negocio.


no


No aplica

Masculino

31

26

26

26

109

Femenino

25

20

5

24

74

Total

56

46

31

50

183

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


En la tabla 4 se aprecia que, de 74 féminas, 78% trabaja su cónyuge, motivo por el cual, podríamos señalar que las féminas realizan una doble jornada laboral. Ahora bien, las actividades desempeñadas por las mujeres, según datos de la tabla 5, observamos que 76 de cada cien


féminas realiza actividades relacionadas con ventas (comida, calzado, regalos ocasionales, para el hogar, etc.) en puestos fijos y móviles. Mientras que los hombres en estas mismas actividades sólo representan el 52% y 35% se desempeña en actividades servicios (instalación de estéreos, plomería, tapiceros, estilistas, etc.).


Tabla 7


Tipo de actividad a la que se dedica * sexo Crosstabulation

Tipo de actividad.



Total



Venta de comida (carreta, aparato movible, desplegable)

14

8

22

Elaboracion y distribucion de pan y tortillas y prurificadoras

7

3

10

Venta de materiales para constru, (plomeria, ferreteria, venta arena, herramientas,.etc)

5

0

5

Venta de vestimenta y calzado (lugar fijo y despegables)

3

10

13

Venta de anotojos (neveria, fruteria, aguas. movible)

3

5

8

Instalaciones y reparaciones (estereos, ropa, plomeria, electronica)

10

2

12

Venta de comida Fijo, (restaurant, cafeterias, cafes, lugar fijo)

25

11

36

Renta de poducto digital (cafe internet, videojuegos)

5

1

6

Venta diversos productos para ocasion (regalos, papelerias y florerias, joyerias)

5

11

16

Venta productos para la salud o profesionale de la salud. (farmacias, naturistas)

3

4

7

Servicios personales, No profesionales (Bolero, orientados espiritual, tapiceros, piñatas)

15

4

19

Venta de productos para el Hogar incluyendo abarrotes, tiendas del dólar, miscelaneas y expendios.

7

14

21

Servicios Personalizados profesionales (medicos, veterinarios, estilistas... etc)

6

1

7

Venta de Maquinaria

1

0

1

Total

109

74

183

Sexo

M F


Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON-


Las actividades femeninas están relacionadas con roles sociales que las féminas asumen como dados de una identidad. Por ejemplo, la elaboración y venta de alimentos; venta de productos para el hogar, venta de joyería, perfumería y flores, que son productos que se asumen como propios de las actividades femeninas.

En relación a la incertidumbre y riesgo social en actividades informales, observamos que sólo 51.7% del total de encuestados dijo contar con algún tipo de seguridad social, destacando que, por cada seis varones con seguridad social, solo lo hacen cuatro féminas.


Tabla 8



Tiene algún tipo de seguridad social


Total

SI

NO

SEXO FEMENINO

42

35

77

MASCULINO

60

60

120

Total

102

95

197

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


Para el caso de la encuesta, se identificó que poco más de un tercio de los productos de los micronegocios familiares, comprende proceso de producción al interior del negocio, mas relacionados con productos que se procesan mediante capital invertido en el hogar. Por el contrario 2/3 partes de los encuestados señalo que la mayor parte del producto que ofrece es de reventa, o se hace un proceso de empaque, presentación o implica actividades menores en el cambio de la presentación del producto, por ejemplo, piénsese en el ejercito de tiangueros o vendedores de mercancías que se adquieren en Estados Unidos u otra parte y son ofrecidos en Nogales. También podría tratarse de actividades como ferreterías menores, estéticas que adquieren los productos en Estados Unidos y son vendidos en Nogales.


Tabla 9



ELABORA

O

COMPRA

A

ALGUIEN

MAS

yo los

elaboro (el negocio)

se los

compro a alguien mas


valores perdidos


Total

SEXO FEMENINO

26

46

5

77

MASCULINO

39

78

2

119

Total

65

124

7

196

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


Es importante identificar que, el origen de los componentes, ingredientes, proveedores, de la materia prima principal del negocio, es heterogéneo, concentrándose el las 2/3 parte de Nogales, elaborado con materias primas locales, lo cual se trata de servicios locales, como taquerías, estéticas, etc. Sin embargo, destaca el 14.5% que proviene parte de Estados Unidos o Asia. Y en menor medida del resto de Sonora o de México.


Tabla 10



ORIGEN

DE

LOS

COMPONENTES PARA LA ELABORACIÓN PRODUCTOS


Total


Estados Unidos

Estados Unidos y México


Asia


Sonora


Nogales


Otros Estados


Valores Perdidos

SEXO FEMENINO

7

2

2

1

55

8

2

77

MASCULINO

5

3

5

2

86

15

3

119

Total

12

5

7

3

141

23

5

196

Fuente: Elaboración propia en base a la encuesta de trabajo atípico, UNISON


Por último, la localización en la frontera hace suponer cierto grado de transfronteriedad de las actividades informales, sin embargo, no se encuesto a ocupados del tipo transborderland, es decir de ocupados en Estados Unidos y viven en México, esta es una agenda pendiente. Lo que se busco es identificar si los productos a la venta en los micronegocios informales son adquiridos o conducidos hacia Estados Unidos, observándose que para el caso del número de clientes que provienen de Estados Unidos, se

Más de dos terceras partes de los micronegocios declaro que tienen clientes que provienen de Estados Unidos. Y poco más de la mitad declaro que, hay clientes que adquieren el producto y lo llevan a Estados Unidos, por ejemplo, el ejército de taquerías matutinas que ofrecen sus productos. O bien los productos de consumo como tortillas de harina, queso, carne de machaca, entre otros productos que son transportados de manera no documentada a Estados Unidos. Obsérvese 86% declaro que no tienen mecanismos formales para transportar el producto que se ofrece hacia Estados Unidos. Quienes señalaron poseer medios formales, en las entrevistas señalaron que hacían referencia al uso de la visa de turista para transportar el producto hacia Estados Unidos. Por ejemplo, familias que transportan entre dos y tres panelas de 45 kilos de queso a Tucsón, Arizona, lo hacen a través del uso de la visa de turista, mecanismo utilizado por otras familias para transportar tortillas de harina, carne de machaca entre otros productos. Actividad muy similar al ejército de tiangueros que cruzan mercancías hacia Nogales, Hermosillo, Ciudad Obregón, Mochis, Culiacán. O bien el ejercito de vendedores de autos usados.


Conclusiones

Los estudios laborales tradicionales priorizaron las relaciones salariales en el sector manufacturero por encima de otras formas de trabajo, como fue el trabajo en servicios y agrícola. Debido principalmente a la idea evolucionista del pensamiento social del siglo XIX que concebía al capital industrial como el motor de la economía global en una continuum evolucionista de carácter irreversible y dinamizador hacia el resto de los sectores. Como centro del análisis el proceso de trabajo industrial se percibía como fuerza productiva y creadora de riqueza la fuerza de trabajo masculina. De tal forma que el trabajo femenino dentro o fuera del proceso productivo no concebía más allá de las actividades domésticas a las que fueron confinadas en el siglo XIX


(De la Garza, 2007, De Oliveira, 2000). Percepción patriarcal que le cedía características superiores a los varones tanto en el proceso productivo como reproductivo. La dominación de esta perspectiva le confirió al varón un estatus social que perpetúo socialmente una brecha de género al considerarle mayor autoridad a la triada ancianos-padres-varones (Stern, 1999).

En el cuerpo del documento explicamos las condiciones estructurales de vulnerabilidad que enfrentan las féminas en el mercado laboral, que ha decir de Masseroni (1997) y Salles (1998) implica condiciones de inseguridad y exclusión. Destacando que las féminas no sólo enfrentan dobles jornadas de trabajo, también son excluidas –parcialmente- de la potenciación de los activos que poseen, como es el conocimiento y habilidades; físico, financiero, sociales, etc. limitándose las estrategias en el uso de dichos activos. Así como la limitación en el conjunto de oportunidades que ofrece el mercado laboral que se trate. La exclusión social se percibe cuando las féminas no potencian las relaciones familiares, las redes sociales, la solidaridad a consecuencia de una serie de restricciones invisibilizadas que enfrentan (Arriagada, 2004 y García y de Oliveira, 1993)


Bibliografía

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De la Garza, E., et al (2007) Trabajo a-típico, ¿Identidad o Fragmentación?: alternativas de análisis. México, D.F.: http://www.izt.uam.mx/alast Acceso 5 de noviembre del 2015

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Salles, V. y R. T. (1998): Pobreza, hogares y condición femenina, en Revista Latinoamericana de Estudios del Trabajo, Año 4 núm. 7, pp. 97-117.

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